viernes, 1 de mayo de 2009

Napoleoncito ayudaba como el esposo que no existía, o lo intentaba. Huelga decir que nunca fue suficiente.

2 comentarios:

laveron dijo...

a ver...eso es lo que hacen todas las madres frustradas...hacer que sus hijos ocupen lugares vacíos. no sos muy original en eso.
y ya basta de lamentación, napoleón...¡Basta!
creo que cuanto más lamentación, más degradación...es un mecanismo morboso. te estás masturbando con tu propio cadáver.
ta bien. te doy la licencia: tu vida es mierda...pero ¿sabés qué? todavía la tenés, con eso que tenés SALÍ DE TU CASA. Cogé, amá, emborracháte y salí de esa vulva comedora...o sea, de la casa de tu madre. este es el momento de que penetres otras vaginas...
BASTA NAP! BASTA!
el 90% del mundo tiene un IQ normal que no sobrepasa el 100 y no entiende que es aquello de que el lenguaje es la casa del ser. es más, no entiende cosas muchísimo más simples...Y VIVE. Porque hay todo otro pedazo de vida que por LAMENTARTE no estás viviendo.
¿Cuánto hace que no te sentás una tarde en un pque, fuera de tu casa y simplemente disfrutás aire puro sin tratar de entender NADA?
Loco, un día vas a mirar atrás y vas a tener 40, 50 años, y te vas a dar cuenta que perdiste la edad más fabulosa para estar enredado en amores, viajes, gente, mundo...ta, perdiste en el reparto de deshilvanar SER Y TIEMPO a través del intelecto más puro...y yo no voy a ser premio nobel de literatura nunca...¿Y?
No dejés ir la edad que tenés sin vivirla...hacéme caso. TE VAS A ARREPENTIR.

beso!
laura

Napoleón Lasagabaster dijo...

No pretendo ser origianl. Por lo demás... tal vez tengas razón.