sábado, 15 de noviembre de 2008
Fíjense en mi ingenuidad constitutiva: fui tan ingenuo que pensaba que mis mayores me tratarían con lealtad si yo siempre les trataba a ellos de igual modo. Hasta me parecía algo aberrante que mis mayores, a su vez, no hiciesen lo mismo con los suyos. Sentí una piedad especial por mis abuelos que sin la estupidez de sus hijos probablemente no hubiese tenido nunca.
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